¡Hola papá! Sabemos que si has llegado aquí es porque muy seguramente tu hijo ha comenzado a leer. Así que hoy, en Kumon, queremos hablarte de la comprensión lectora y de cómo puedes identificar si tu hijo entiende lo que lee. 

El objetivo final de la lectura es entender el texto y poder sacar conclusiones de él, pero para lograrlo se requiere de mucha práctica porque la comprensión lectora es un proceso complejo. Por lo tanto, lo primero que debemos preguntarnos es si el libro que lee tu hijo es el adecuado para su nivel de vocabulario y de comprensión lectora. Si no lo tienes claro, visita nuestro blog:  

¿Cómo escoger el libro infantil adecuado para tus hijos? 

 

Empecemos por saber que la compresión lectora es un proceso que requiere de mucha concentración y energía mental porque involucra varios aspectos. Primero, se necesita decodificar y recabar información del texto. Después, mientras se lee, se organiza la información para que tenga sentido. Y finalmente, se comprende y se tiene una posición y análisis frente a lo que se lee.

Entonces para saber si tu hijo entiende lo que lee, es necesario hablar de estos procesos implícitos en el aprendizaje de la lectura:

 

1. Procesos Perceptivos:

Cuando leemos, nuestros ojos realizan movimientos dirigiéndose hacia las palabras y las frases. Vamos yendo de izquierda a derecha, (movimientos sacádicos), parándonos en algunos puntos, (fijación) y para poder hacer todo esto es importante tener adquiridas una serie de habilidades visuales que se van desarrollando desde que nacemos.

Puedes identificar que tu hijo tiene un desarrollo inadecuado de sus movimientos oculares cuando: invierte las letras cuando escribe, se salta de línea cuando lee, mueve excesivamente la cabeza cuando lee o repite mucho las palabras.

2. Procesos Sintácticos:

Se refiere a la capacidad de comprender cómo se relacionan las palabras de una oración entre sí. Aquí necesitarás identificar si tu hijo reconoce las palabras y sabe lo que significan pero además entiende cómo se organizan en la oración. 

Te lo explicamos con un ejemplo: 

Si le decimos al niño que: “el profesor dejó tarea a sus estudiantes” decimos que el primer sustantivo, “El profesor”, es el sujeto. Mientras que el segundo, “el estudiante”, es el objeto de la acción que expresa el verbo. 

Pero si cambiamos el orden a: los estudiantes recibieron la tarea del profesor o los estudiantes tienen tarea que dejó el profesor, aquí cambia el orden la acción y muchos niños tienen dificultades para entender cuando esto sucede.  

3. Procesos semánticos:

Este proceso se realizará con éxito cuando se comprende lo que significan todas palabras del texto y pasa a ser ahora parte del conocimiento.  

3. Procesos inferenciales:  

Aquí es el punto en el que el lector es capaz de hacer deducciones de lo que se lee, incluso de añadir la información que no aparece. Puedes evaluarlo preguntándole a tu hijo situaciones que no estuvieron implícitas pero que se podrían deducir de la lectura. 

Un ejemplo: Luis quería viajar a conocer Medellín pero no habían vuelos en la fecha que quería. Aquí se puede inferir que Luis buscó los vuelos en diferentes aerolíneas. Se dió cuenta que no habían disponible. Decide no viajar o viajar en otra fecha. 

Este es el más complejo de todos y en el que más apoyo debes brindarle a tu hijo.  

A continuación, tres tips para ayudarle a tu niño a mejorar su comprensión:

Haz preguntas 

Hazle preguntas que le hagan pensar sobre lo que acaba de leer. Por ejemplo: ¿Por qué crees que hizo eso? o ¿Qué está ocurriendo ahora? 

Hablen sobre los distintos significados de las palabras 

Jueguen juegos de palabras. Como por ejemplo las palabras que suenan igual pero tienen diferentes significados como "ratón", que es un animal y también un elemento para usar con el computador. 

Enséñale trucos de comprensión 

Cuatro de estos trucos son: resumir, hacer predicciones, usar el contexto y supervisar. Te explicamos: Pídele que te cuente de nuevo un cuento en unas pocas oraciones (resumir). Pregúntale qué cree que va a ocurrir después (predecir). Enséñale cómo descifrar el significado de una palabra desconocida basándose en las otras palabras y las ilustraciones (usar el contexto). Explícale la importancia de identificar, durante la lectura, cuando no se está entendiendo lo que se lee y volver a repetir la lectura. Tu hijo podrá identificar esto mientras lo acompañas a leer y pídele que lea de nuevo (supervisar). 

Si quieres más tips puedes descargar nuestra Guía Kumon gratuita de comprensión lectora para niños.

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